Las cápsulas de retinol y ceramida asocian las potentes propiedades del retinol para eliminar las arrugas y los beneficios hidratantes y reparadores de la barrera cutánea que proporcionan las ceramidas. Unidos, ambos ingredientes atenúan de forma visible el aspecto de líneas de expresión y arrugas y mejoran la textura, el brillo y la luminosidad de la piel para conseguir un aspecto espectacularmente más joven.

Estas tecnologías complementarias permiten a Elizabeth Arden ofrecer unos resultados visibles protegiendo la piel contra la sequedad ligada a la utilización de productos a base de retinol.
Aunque es tremendamente potente, el retinol es extremadamente sensible a la luz y al aire, que pueden alterar su estabilidad. El formato en cápsulas monodosis permite una dosificación específica y precisa y, junto con un meticuloso proceso de fabricación, contribuye a proteger el retinol de la exposición a la luz y al aire para garantizar la eficacia óptima de los principios activos en cada aplicación.

Una potencia que queda demostrada tras pruebas de estabilidad*: el retinol de las cápsulas era un 76% más poderoso que su equivalente no encapsulado.

*según un estudio de una duración de vida lineal de 10 meses.